Invitación al viaje. Los Poblados de Colonización en el Museo ICO (Madrid)
La exposición realiza un recorrido completo por 300 pueblos de colonización desde su creación por el Instituto Nacional de Colonización (INC), hasta su situación actual
La exposición que acoge el Museo ICO en su sala de la calle Zorrilla de Madrid, Poblados de colonización. Miradas a un paisaje inventado, comisariada por Ana Amado y Andrés Patiño, es atractiva e interesante, resulta oportuna y se apoya en una investigación solvente a la que se añade el trabajo fotográfico de Amado.
El ICO suma a su notable trayectoria expositiva esta visión del conjunto patrimonial de los poblados de colonización construidos por el régimen franquista, a través del Instituto Nacional de Colonización, entre 1939 y 1971. El material exhibido es importante: planos, maquetas, piezas artísticas originales, videos y fotografías. El montaje expositivo exhibe muchas piezas, casi abigarradas, pero de lectura clara y ordenada. El recorrido ofrece una secuencia lineal en planta baja centrada en el trabajo planificador y creativo de los arquitectos que protagonizaron este capítulo imprescindible de nuestra modernidad y utiliza una evocación de la Sala Negra, vinculada al Museo de Arte Contemporáneo impulsado por Fernández del Amo, como charnela para acceder a la planta superior en la que las fotografías de Ana Amado y tres proyecciones de video, ofrecen una visión social y ambiental de la realidad actual de estos conjuntos rurales. Las fotografías se exhiben en un espacio fragmentado por evocaciones de formas arquitectónicas arquetípicas, en un equilibrio interesante entre lo kitsch y lo irónico.
Exposición «Poblados de colonización. Miradas a un paisaje inventado»
Museo ICO Madrid. Foto por Fernando Agrasar, 2024.
Toda propuesta expositiva es un relato, y aquí es dónde la muestra sobre los poblados de colonización no apura las posibilidades de la fantástica oportunidad que ha ofrecido el ICO. Como ya se ha señalado, la investigación en la que se apoya la muestra es valiosa, pero parte de un abundante y excelente trabajo previo de numerosos especialistas que han estudiado a fondo este fenómeno de la modernidad española. Las publicaciones de estas investigaciones no tienen la necesaria presencia en la exposición. Textos como los del Miguel Centellas y otros muchos autores, o el trabajo realizado por DoCoMoMo Ibérico de inclusión en sus registros y presencia en sus congresos, deberían incluirse para visibilizar la atención que estos poblados modernos han suscitado entre los investigadores.
Al trabajo de documentación, consultado y realizado, se han sumado las numerosas visitas de los comisarios a los poblados de colonización para comprender su realidad social y captarla a través de la cámara. Esa realidad social y ambiental es uno de los grandes aciertos de la muestra, pero nos ofrece una ruralidad de habitantes sonrientes, con sus rostros marcados por el tiempo y una memoria de resiliencia y esfuerzo cuya dureza sólo podemos entrever en el fondo de sus miradas.
Exposición «Poblados de colonización. Miradas a un paisaje inventado»
Museo ICO Madrid. Foto por Fernando Agrasar, 2024.
Esa ruralidad sobria y feliz nos ahorra reflexiones sobre el futuro de ese patrimonio, de su pervivencia, hasta ahora soportada por la precariedad, y el aislamiento, de las intenciones y valores del régimen totalitario que los hizo posible, incluso de esa manida y rancia idea de la “integración de las artes” que llenó las iglesias de notables obras artísticas, mientras colegios y otros espacios sociales carecían de ellas. La inclusión en la exposición del fotorreportaje de Eugene Smith, Spanish Village, publicado en Life en 1951, con una visión expresionista y negra de la vida rural bajo el franquismo, y el trabajo de Kindel, que ofrece una visión del contraste entre el duro y preindustrial trabajo agrario y el orden construido moderno son dos perspectivas que bien podrían haber impulsado una toma de postura crítica, contemporánea y necesaria, con la pregunta fundamental: ¿Cómo mantenemos vivo ese enorme y valioso patrimonio creando las condiciones para inyectar nueva vida sin destruirlo?.
Por el interés de tema, los materiales expuestos, el montaje expositivo, el trabajo fotográfico, acompañados de un catálogo que refleja perfectamente contenidos y espíritu de la muestra, Poblados de colonización. Miradas a un paisaje inventado es una exposición que no hay que perderse, como una invitación al viaje a cada uno de los más de trescientos pueblos de colonización que son una parte sustancial de nuestro patrimonio arquitectónico moderno.
Exposición «Poblados de colonización. Miradas a un paisaje inventado»
Museo ICO Madrid. Foto por Fernando Agrasar, 2024.