Exposición «Visiones Expandidas». Experimentaciones fotográficas y afinidades arquitectónicas

Visiones expandidas a la Arquitectura

Cómo no conectar las estructuras estenopéicas de Gottfried Jäger con la piel de la torre Agbar de Nouvel, las construcciones especulares de Noémie Goudal con la torre Hearst de Foster o las recomposiciones de elementos conocidos de Raoul Hausmann con cualquier obra de Gehry desde 1980. Otras afinidades poseen una naturaleza más teórica que formal, como los juegos secuenciales de haz y envés de Jeff Guess y las obras de Anupama Kundoo, la intimidante vibración del retrato de Luisa Casati, de Man Ray, y la intervención de Kazuyo Sejima y Ryue Nishizawa en el Pabellón de Mies, o los rastros de luz que Olafur Eliasson, con experiencia como breakdancer, deja con el movimiento de su propio cuerpo, casi como un documento de proyecto de la ampliación de San Telmo, de Nieto y Sobejano. Las elegantes deformaciones de Jean-Paul Goude, están conectadas con la Casa do Cinema, o las dos casas en Ponte da Lima de Souto de Moura. Y, sin duda, el autorretrato de Herbert Bayer posee las mismas dosis de violencia, inteligencia creadora e ironía que las obras más recientes de Rem Koolhaas, en la que una mutilación es juego, evocación clásica y radical modernidad.

La arquitectura contemporánea precisa escapar de la jaula autorreferencial en la que se ha encerrado. La imprescindible exigencia técnica y la asfixiante inercia formal neomoderna no pueden ser las únicas dos columnas de nuestras intervenciones.  La fotografía, como otras manifestaciones artísticas y otros mundos de conocimiento, ofrecen investigaciones esenciales para seguir nutriendo nuestra constante modificación del medio habitado. Sólo hay que saber percibir y conectar esas nuevas afinidades.