
El Cristal es mi piel, una instalación para Instagram en el Palacio de Cristal (Madrid)
La intervención titulada “El Cristal es mi piel” se ha realizado expresamente para el espacio del Palacio de Cristal en el Parque del Retiro de Madrid, obra de las artistas Pauline Boudry (Suiza, 1972) y Renate Lorenz (Alemania, 1963). La instalación organizada por el Museo Reina Sofía puede visitarse hasta el 9 de abril del 2023. Una cita imprescindible para aquellas personas interesadas en la arquitectura, ya que nos permite experimentar el espacio del Palacio de Cristal de una manera diferente. Sin embargo, la instalación en sí nos genera ciertos reparos por su planteamiento, pues parece tener como objetivo principal el ser fácilmente reproducible en las redes sociales.
El edificio como protagonista
La intervención busca resignificar el Palacio de Cristal, que fue realizado en 1887 con motivo de la Exposición General de las Islas Filipinas, colonia española desde el siglo XVI hasta 1898. Se construyó como un gran invernadero para dar a conocer la vida y la cultura de la colonia. Una arquitectura que se inspiraba en el desaparecido Crystal Palace en el Hyde Park realizado por Joseph Paxton para la Exposición Universal de Londres de 1851.
Boudry y Lorenz han explicado que el ser conscientes del pasado colonial del edificio “… nos impactó. Nos impactó que un espacio tan bello pudiera contener una historia pasada tan violenta”. Por ello, este equipo de artistas busca romper con la carga colonial del Palacio de Cristal, introduciendo un discurso alternativo sobre identidad y resistencia. Para ello, redefinen el espacio arquitectónico del Palacio, inspirándose en la atmósfera de un club queer mediante el uso del humo, escenarios de espejos y una canción expresamente compuesta para la instalación.
En determinados momentos, las plataformas de espejos exhalan humo y el edificio transparente se vuelve completamente opaco. El aire se espesa y la luz se transforma, cambiando totalmente la percepción del espacio. El sol desaparece y se convierte en un círculo naranja. El humo sirve como herramienta estética para transformar y cuestionar la transparencia y significado del Palacio de Cristal, para desestabilizar y modificar la percepción de los cuerpos de las personas en su interior. Se genera una nueva atmósfera en su interior, que cambia con el tiempo.
Las plataformas de espejo no son accesibles, se muestran inestables y reflejan el ambiente y los cuerpos que se mueven en el espacio. En sus superficies inclinadas, el Palacio se muestra reflejado parcialmente, con perspectivas cambiantes y distorsionadas.
Boudry y Lorenz han invitado a la compositora e intérprete Aérea Negrot a participar en “El cristal es mi piel”, con una canción compuesta e interpretada por Negrot con letra escrita en colaboración con las artistas. La música se desplaza por el Palacio a través de los diferentes altavoces, por lo que el público, si quiere seguir la canción, tiene que moverse y desplazarse, generándose una curiosa coreografía.
Entrar en escena: visibilidad y opacidad
Al acceder al Palacio la sensación de desestabilización es tremendamente potente, ya que pierdes las referencias visuales por el humo. Nada más entrar, instintivamente la gente se mueve rápidamente al perímetro del Palacio, entre la piel de cristal y las columnas perimetrales de hierro, donde puedes observar el exterior y quizá, sentirte algo más orientada. Luego, tras entender el espacio, comienzas a entrar en escena, a moverte, a descubrir poco a poco el desdibujado espacio del Palacio de Cristal.
El propio edificio entra en escena en la instalación, la contiene e interactúa con ella. Continente y contenido, se entrelazan, tanto la arquitectura del Palacio de Cristal como los cuerpos que lo habitan. Según la intensidad del humo y como se disipa, el espacio cambia. Según las propias artistas, en esta propuesta:
el escenario evoca ese momento en que uno “entra en escena”, en que aparece en público, en que empieza a actuar. Es un momento de transición, el frágil instante que separa el no actuar del actuar, el entrar del no entrar en escena, la invisibilidad de la visibilidad
¿Una instalación para Instagram?
Frente a esta propuesta, es inevitable nombrar la referencia arquitectónica The Blur, el pabellón de Diller Scofidio + Renfro, como hito de una arquitectura ligada a lo atmosférico en la Expo Suiza 2002. La pérdida de la visión, la deriva, lo borroso, el movimiento, lo impredecible …, generaba un espacio en cambio que cuestionaba las relaciones entre la forma arquitectónica, el contexto y el uso de la arquitectura. O por nombrar otra referencia clave desde lo artístico, The Weather Project de Olarfur Eliasson en la Tate Modern en Londres en 2003, con el fin de tomar conciencia sobre el cambio climático. En la gran sala de turbinas, se generó una nueva atmósfera con la niebla artificial y, al fondo, una semiesfera retro iluminada difundía una luz cálida que se multiplicaba gracias a unos espejos.
Veinte años después de ambas referencias y a pesar del gran interés que sin duda tiene el experimentar de esta nueva manera el espacio del Palacio de Cristal, el conjunto de la instalación “El Cristal es mi piel” no logra la profundidad que prometía desde su discurso. Trasmite una gran superficialidad tanto por la manera de presentarse -perfectamente estudiada para ser expuesta y digerida en las redes sociales- como por el ambiente que se genera entre el público.
Pauline Boudry / Renate Lorenz
Boudry y Lorenz trabajan como colectivo en Berlín desde 2007 y su obra se encuentra entre la colección del MNCARS. Hace unos meses expusieron dos de sus instalaciones más premiadas -‘(No) Time’ (2021) y ‘Moving Backwards’ (2019)- en el CA2M de Móstoles (Madrid).
Producen instalaciones que coreografían la tensión entre la visibilidad y la opacidad. Sus películas capturan actuaciones frente a la cámara, a menudo comenzando con una canción, una imagen, una película o una partitura del pasado cercano. Sus propuestas multidisciplinares, en las que la ‘performance’ y la danza llevan la voz cantante, reivindican cierta dimensión ‘queer’ y cuestionan los relatos –históricos, sociales– hegemónicos.
DATOS
Pauline Boudry y Renate Lorenz
«El Cristal es mi piel»
Palacio de Cristal. Parque del Retiro de Madrid
Fechas: 7 de octubre de 2022 – 9 de abril de 2023
Entrada: Gratuita
Organización: Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía
Coordinación: Soledad Liaño, Teresa Velázquez Cortés